La leyenda venezolana del Hachador Perdido

"Si por la noche se escucha cabalgar algún lamento en San Casimiro, se pinta la sombra de tu recuerdo, si es que te encuentras penando en las montañas del tiempo, con gusto Hachador Perdido, yo te rezare tu Credo."

Así empieza el corrido del Hachador Perdido, un aterrador personaje de las leyendas venezolanas, que se describe con un ser alto, calvo, con ojos de fuego incandescente, dientes afilados, manos planas como de rana y el pecho cubierto de lana. Él lleva siempre consigo un hacha para atacar a todo lo que se mueva en las montañas.

Según se cuenta entre la gente, este hombre fue un leñador, que en vida cazaba solo por ambición y no para sobrevivir. Este hombre tenia la intensión de fabricar su propia urna, por lo que un Viernes Santo se fue al monte con el propósito de llevar a cabo esta tarea, asi que recorrió el lugar buscando el árbol más apropiado para tallar su caja.

Después de un rato, se decidió finalmente por un árbol y al momento de levantar su hacha para empezar a cortar el tronco, Dios envió un castigo para él, convirtiéndolo inmediatamente en espectro, al alma condenada a penar, vagando por los campos, bosques y llanuras eternamente, castigando a aquellos que como él lo hizo en vida, solamente se dejen llevar por la ambición.

Antes de que este horripilante ser se haga presente se pueden escuchar los secos y prolongados golpes de su hacha, en este momento aun es posible alejarse, y no continuar con lo que se pretendía, pero si una persona insiste en seguir cazando, el hachador perdido le propinará una paliza, o dos, también puede que acabe quitándole la vida según el castigo que merezca por el acto actual y los pasados.

Espero les haya gusta mucho tanto como a mi esta leyenda venezolana que escribimos con mucho placer y tomamos de referencia este sitio, para poder crear una adaptación a esta narración, así que les dejamos los créditos.